19 de mayo de 2016
Capítulo 1 / Perdida
Edward Cullen estaba de pie, a la sombra de las cortinas, pero no escondido por completo. El hombre de detrás del escritorio de madera, el doctor Vulturi, lo estaba viendo. Aunque Vulturi adoptaba una actitud profesional, Edward se dio cuenta de las gotas de sudor que había en su frente y en su labio superior, mientras sostenía el bolígrafo entre sus dedos y dibujaba, de forma tensa, círculos en la carpeta que tenía delante.
La atmósfera de aquella espaciosa habitación era sofocante. Los muebles de madera la abarrotaban y los cortinajes le daban mayor sensación de oscuridad. No olía a medicinas, tan sólo a madera vieja y aceite de linaza. Olores que no eran muy agradables, porque la madera olía a podrida, La carcoma estaba destruyendo la estructura detrás de aquella fachada.
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