Capítulo 13 / Una Segunda Oportunidad



Bella quería irse a su casa.

Salió del baño, se secó y se vistió para luego volver a meter sus cosas en la maleta. Mientras tanto no dejaba de pensar en qué pasaría si tomara un taxi se fuera al aeropuerto y tomara el primer avión que volviera a Australia, las preguntas que provocaría, lo mal que se sentiría al tratar de explicarse, las molestias que le causaría a todo el mundo.

No podía afrontado. Todavía no. No hasta que no hubiera pensado en lo que estaba ahora y en cuál sería su próximo paso a dar.

Las ganas de volverse a casa eran parejas al dolor que sentía y nada de eso iba a desaparecer en poco tiempo. Por fin, su cansada mente pensó en el único hotel que conocía en Londres, en el que Edward se había quedado siempre hasta ahora. Por lo menos le sonaba. Le Meridien tenía más de doscientas habitaciones. Llamó y vio que quedaban libres, así que la reservó.

Aliviada por tener un lugar donde esconderse, aunque fuera temporalmente, terminó de hacer el equipaje. Cuando estaba echando un vistazo a su alrededor para ver si se le olvidaba algo, su mirada se posó en el cuaderno de la mesita de noche, donde estaban los teléfonos que le había dado Edward.

¿Le importaba algo a él? ¿O sólo le importaba lo que le pudiera suceder a los niños?


Las lágrimas le nublaron la vista. No debería haber ido a ese viaje. Había sido un terrible error. Una esperanza ciega en que pudieran transformar su matrimonio en algo diferente, real, verdadero y especial, casi nada.

Ahora lo comprendía todo. La razón por la que él no había creído en que lo que ella estaba haciendo mejoraría su relación. Incluso le había dicho que ya era demasiado tarde para eso. Cuando estuvieron dentro del avión y se vio obligado a soportar su presencia durante todo ese tiempo, había puesto buena cara a lo inevitable y ella había sido tan tonta de tragárselo.

Pero ya no podía soportar más. Estaba más que harta. Deseó no haberlo descubierto nunca, haberse quedado en su casa, pero lo hecho, hecho estaba.

Ahora era Edward el ciego, si se creía que con cambiar de apartamento a Lauren iba a arreglar la situación. Lo único que había hecho era quitarle el cuerpo del delito de delante de las narices. ¡Y era él quien le había echado en cara el que estuviera viviendo una mentira!

Se enjugó las lágrimas. ¿Quién podría haber pensado que tuviera tantas? Debía haberlas soltado todas en el baño.

Bueno, ya estaba lista para irse, casi. Le quedaba un problema, el de hacerle saber a Edward donde se iba a quedar. Desaparecer por completo le parecía demasiado cruel y no quería que se preocupara por ella. Simplemente quería que la dejaran en paz. Le resultaba difícil pensar. Era sorprendente cómo se las había arreglado para organizarse hasta entonces. Seguía mirando el papel con los teléfonos, pero no quería hablar con él. No, no lo podía soportar. Por fin tomó el cuaderno y escribió lo que esperaba que fuera un mensaje claro para él. Encontró un sobre metió allí la nota.

Luego llamó a un botones.

En la recepción había una chica distinta, ya que había cambiado el turno, lo que la alegró, así no tendría que explicar nada. Le dio el sobre con instrucciones de que se lo dieran personalmente a Edward Cullen, no a su secretaria personal.

El portero le llevó el equipaje a la calle y le llamó a un taxi. Mientras el taxista estaba metiendo la maleta en el portaequipajes, la furgoneta de una floristería aparcó a su lado y de ella salió un chico con una gran cesta de rosas.

Rosas rojas, de amor.

Verlas le produjo más daño aún, recordándole el gesto fútil que ella misma había hecho la semana anterior. Les dio la espalda y entró en el taxi.

No sabía cuándo el amor había desaparecido de ella, pero lo había hecho. Su matrimonio estaba muerto.

Deseó entonces que el corazón le dejara de sangrar.


10 comentarios:

  1. Ayyy bellita!!!!! Que poca comunicación y tranquilidad había en e ese matrimonio.... espernado el siguiente con ansias

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  2. Lo dicho, ahora para que Edward arregle las cosas le va a costar un mundo!!! Ojalá puedan arreglar las cosas, no me gustan los finales tristes 😖

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  3. Ella se siente herida pero si en verdad el la quiere hará todo para recuperarla

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  4. Se fue antes de k llegaran las rosa nooo edward t toca mover ficha y no lo heches a perder!!!

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  5. Pobre Bella... Aunque por lo menos dejó una nota de donde iba a estar... Espero que esta vez Edward vea que Bella va en serio...
    Besos gigantes!!!
    XOXO

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  6. siento feo pero a la vez no
    creo que Edward necesita sentir que la pierde
    solo espero que no se equivoque y que sepa recuperar a su esposa

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  7. Ahora Bella es muy impulsiva si quiera salvar su matrimonio por qué no hablo con Edward y el como se tomará esta decisión??

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  8. Ahora le toca a Edward devolver todo el esfuerzo q realizó ella por su matrimonio. . Ojala y no se haga el imbecil..

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